El cemento es uno de los materiales que mejor repele las radiaciones, lo que podría ayudar a proteger naves, ropa y hasta alimentos de astronautas que están a expensas de dichas propagaciones de energía.
De este conocimiento partió José Armando Becerra Hernández, estudiante de la Ingeniería en Nanotecnología del Centro Universitario de Tonalá (CUTonalá) de la UdeG, quien junto con un equipo de jóvenes de diferentes partes del mundo participó en el programa Internacional Aéreo y Espacial de la NASA, en Alabama.
Ahí, su idea de crear nanotecnología a partir de los componentes del cemento para lograr un material que proteja de la radiación en el espacio, ganó el tercer lugar de entre ocho equipos. “Mediante un proceso llegaríamos al recubrimiento de naves espaciales, materiales de envasado de alimentos. Este material dispersa la radiación para que no se dañen las estructuras moleculares de los alimentos, e incluso que no haya daños genéticos en la salud en los alimentos”, dijo.
“Esto nos valió el tercer lugar, con lo que se pactó que seguiré trabajando en el desarrollo del proyecto con ayuda del CUTonalá para desarrollarlo, llevarlo al espacio y después aplicarlo en la NASA”, explicó el joven.
Una vez terminado el material, enclavado en una placa de pocos centímetros, será enviado al espacio como parte del Experimento de Materiales de la Estación Espacial Internacional (MISSE, por sus siglas en inglés), que consiste en la colocación de distintas innovaciones expuestas en órbita, con apoyo de AEXA.
Tras ser expuesto durante meses en el espacio, el material regresará a la Tierra, para evaluar su eficacia y, de funcionar, será patentado por el CUTonalá para comercializarlo.
El profesor investigador del Departamento de Ciencias Básicas y Aplicadas del CUTonalá, doctor Víctor Hugo Romero Arellano, detalló que el blindaje de radiación es importante en el espacio, pues en la Tierra existe mayor protección como la atmósfera y los campos magnéticos.
“A nivel terrestre, la radiación a la que estamos acostumbrados es la solar, que sentimos como calor; también está la radiación de rayos x, que es más energética y que penetra la piel. Pero hay otras radiaciones como la gamma y de neutrones que son altamente energéticas y que penetran placas de acero”, dijo.
“En las misiones espaciales los astronautas salen de la protección de la Tierra y son expuestos a estas radiaciones, por lo que se necesitan materiales especiales que sirvan como blindaje”, añadió Romero Arellano.
La propuesta del proyecto de Jorge Armando es extraer estructuras diminutas del cemento o replicarlas para agregarlas a otros materiales ligeros y manipulables, que permitan bloquear la radiación.
Este proyecto, dijeron, está en la primera fase de investigación, para después ponerlo en órbita, que quizá despegue entre finales de 2024 y 2025; en el espacio estaría durante seis meses y en 2026 tendrían los resultados.
El Jefe del Departamento de Ciencias Básicas y Aplicadas del CUTonalá, doctor José Antonio Rubio González, recalcó que desde este campus de la UdeG se busca apoyar a jóvenes.
“Al ser un centro multidisciplinar el apoyo es para todas las carreras; en estos proyectos participan más quienes estudian tecnologías, pero los programas están abiertos para todos”, dijo. En este caso, se hace a través del Laboratorio de Síntesis de Materiales Avanzados.
Atentamente
“Piensa y Trabaja”
“30 Años de la Autonomía de la Universidad de Guadalajara y de su organización en Red”
Multitemáticos”
Guadalajara, Jalisco, 8 de febrero de 2024
Texto: Iván Serrano Jauregui
Fotografía: Fernanda Velazquez
En CUTonalá trabajan en material anti radiación espacial a partir del cemento
Estudiante de Ingeniería en Nanotecnología emprende proyecto tras participar en la NASA, donde su propuesta quedó en tercer lugar y será llevada al espacio